Vale un millón, es uno menos en Pumas y mejor debería dedicarse al golf

Pumas contrató a seis jugadores con la esperanza de que ofrecieran el salto de calidad que hacía falta en los torneos anteriores. Lamentablemente la inversión millonaria de la directiva de nada sirvió porque se quedaron fuera en un torneo donde califican 12 equipos a la fase final.

Dani Alves inició lento y cuando tomó ritmo ya era demasiado tarde, Gustavo del Prete fue un costoso bulto de 90 millones, Gil Alcalá se quedó en la banca, los buenos momentos de César Huerta fueron esporádicos, el único fichaje constante fue Eduardo Salvio, el terror de las defensas. 

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Quien se unió al Tuti en la lista de troncos es Adrián Aldrete, un elemento que nadie quería por su pasado en chemos y wilas, pero que la directiva trajo para reforzar la banda izquierda. Su torneo fue un desastre, se le vieron encima los 34 años que acarrea y podría salir del club.

Entre Aldrete, Jerónimo Rodríguez y Efraín Velarde no se hizo un solo lateral eficiente. Allí estuvo una de las mayores debilidades del equipo durante el Apertura 2022. Ahora el doctor Miguel Mejía Barón debería de buscar un defensa por ese costado para evitar más desastres.

Mejor que se dedique al golf

Adrián Aldrete tiene como su principal pasatiempo el golf, sin importar si su equipo está en la Ciudad de México o en cualquier lugar de la república, siempre busca un campo para practicar ese deporte. Quizá debería de enfocarse en eso porque como Pumas ha quedado a deber.