Ni Rogério era tan tronco, le costó 80 MDP a Pumas y lo acusan de estafador

Pumas se reforzó para el torneo Apertura 2022 como nunca antes se había visto, sanaron las finanzas el club y dejaron a un lado la llegada de sudamericanos de bajo perfil para apostar en grande con la esperanza de pelear por el título. 11 partidos después la situación es crítica, los refuerzos se han quedado cortos de lo esperado y la afición está harta.

Dani Alves, Eduardo Salvio y Gustavo del Prete no son ni la sombra de lo que prometían, el brasileño vive el peor momento de su carrera, pero que haya llegado con 39 años también es un factor, hasta ahora continúa como titular nada más por su jerarquía y porque sabe que está siendo monitoreado para ver si entra en la convocatoria para Qatar 2022.

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Por otra parte, Gustavo del Prete está vuelto un fantasma. Andrés Lillini lo pidió personalmente, le llamó por teléfono y el argentino reconoció que ese interés hizo que se decidiera por Universidad Nacional cuando otros equipos lo pretendían. Tuvo uno, tal vez dos buenos partidos, luego se desapareció, su capacidad de generar peligro es nula.

Quien todavía tiene el beneficio de la duda es Eduardo Salvio, el ex de Boca Juniors que se lesionó justo cuando estaba dando su mejor partido contra el Atlético de San Luis, parecía la salvación del club después de haber anotado dos goles ante los potosinos. El ‘Toto’ volvió a padecer algo que le ha afectado durante toda su carrera: las lesiones.

¿A quién acusan de estafador en Pumas?

Pumas gastó 4 millones de dólares, es decir alrededor de 80 millones de pesos, en Gustavo del Prete, el argentino que ha demostrado hasta ahora ser un sudamericano más que pareciera vino por el dinero. La afición ya se cansó de que desaparezca en la cancha y no pueda controlar un balón e incluso ya le dio el calificativo de estafador, ni Rogério se ganó ese calificativo.