Por Jesus Lopez
Andrés Lillini vive su momento más difícil como entrenador de los Pumas de las UNAM, pero no por eso es el peor estratega del mundo. El argentino ha vivido momentos dorados con la institución y lo hizo con planteles de bajo presupuesto, así que cuando deje su cargo le sobrarán ofertas de trabajo en la liga.
Universidad Nacional podría despedirlo tan pronto como este fin de semana si todo sale mal contra los Rojinegros del Atlas o también está la opción de que se quede hasta el final del torneo pase lo que pase en las siguientes seis jornadas, ya sea que logre la hazaña de entrar al repechaje o todo quede en una vergonzosa eliminación.
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El estratega felino posee la etiqueta de ser quien más tiempo tiene al frente de su equipo en toda la Liga MX, más que correrlo, parece que su ciclo de dos años está por llegar a su fin. Nada mal para alguien que llegó como bombero de manera interina porque Míchel González dejó a la deriva al equipo.
Si Andrés Lillini se encuentra en sus últimos días al frente de los Pumas se puede ir con la cara en alto. En este momento la afición se encuentra molesta, pero en cuanto se vaya quedará un cariñoso recuerdo por los buenos momentos, llegó a dos finales con equipos más que discretos, sólo le faltó un título en su historial.
Más de un equipo cambiará de técnico de aquí al próximo torneo y uno que podría ir con todo por Andrés Lillini sería Cruz Azul. El argentino ha sido verdugo de los cementeros en múltiples ocasiones y parece el ideal para llevar la reconstrucción que hay en los chemos, sería potencialmente una opción si al final deciden darle las gracias al Potro Gutiérrez.
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