Por Jesus Lopez
Pumas se quedó lejos de pelear por el título en un torneo donde se arrancó con unas expectativas poco antes vistas. La inversión de millones de dólares en jugadores como Dani Alves, Gustavo del Prete o Eduardo Salvio al final terminó por ser una de las decepciones más grandes en la historia del club.
Todos los señalamientos van hacia el brasileño por su estatus de estrella mundial, el brasileño tuvo altibajos en el Apertura 2022, arrancó fuera de forma, pero con el paso de las jornadas fue mejor. Frente a La Franja volvió a ser un fantasma y demostró su autoridad tras saltarse a Andrés Lillini.
No es Dani Alves, el bulto de Pumas que estaría en sus últimos días con el club
Tenía más hue… que del Prete, Pumas lo dejó ir y ahora exigen su regreso
En medio de la desesperación por remontar, Alves mostró su autoridad en Pumas al hacer lo que quiso en la cancha. Arrancó de mediocampista, pero en el segundo tiempo se le veía de lateral, en medio campo o detrás de Juan Ignacio Dinenno, tuvo la libertad que sólo se le ve a cracks de la talla de Cristiano Ronaldo o Lionel Messi.
Desde que llegó impuso en sus condiciones jugar los 90 minutos y así fue de nueva cuenta, hasta los tiros libres cobró. Trató de capturar toda la atención, sin embargo, de nada sirvió. Aun así, su libertad para pisar la cancha donde quiera reflejó que está por encima de cualquier indicación del estratega.
La magia de Dani Alves se quedó fuera del Estadio Cuauhtémoc, en los partidos recientes había servido pases de gol que sus compañeros fallaban de manera increíble, esta vez ni siquiera pudo hacer eso. Fue incapaz de generarle una acción a Juan Ignacio Dinenno o Diogo de Oliveira.
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