Llegó a Pumas como crack, fue peor que Robin Ramírez, nadie lo quiso y se retiró

En Pumas ha habido una gran cantidad de petardos a lo largo de su historia que están a la altura de Gustavo del Prete, el jugador de los 4.5 millones de dólares que ahora es acusado de estafador por la hinchada. Quizá el argentino sea el más costoso, pero otros también trajeron grandes expectativas y se fueron sin pena ni gloria.

Uno de ellos es Joffre Guerrón, el ecuatoriano que tuviera años dorados en Tigres y luego le pesó la camiseta de Universidad Nacional. El ecuatoriano ganó el premio a mejor jugador en la Copa Libertadores en 2015, pero los regios lo borraron por la llegada de André Pierre Gignac, pasó a Cruz Azul y de allí a Pumas.

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El delantero llegó como la bomba para el Apertura 2017, sin embargo, nunca detonó, claramente ya estaba en el declive de su carrera, aun así, tuvo la confianza de la directiva. En un año con la institución jugó apenas 13 partidos y anotó un gol, lo más increíble es que terminó por recibir más tarjetas amarillas (5).

Ni siquiera otro famoso bulto como Robín Ramírez tuvo tan mal paso en la UNAM, el paraguayo al menos jugó más partidos, tuvo más goles y no fue una máquina de amonestaciones. Joffre Guerrón tuvo una etapa decepcionante en los Pumas y terminó por volver a su país.

Se tuvo que retirar

En el Barcelona de Guayaquil disputó sus últimos minutos como profesional, estuvo seis partidos en blanco. Luego ya nadie lo quiso firmar y desapareció de la órbita. A la edad de 33 años se tuvo que retirar por la falta de interés, algo impensado después de que la rompiera en su llegada a México.