El jugador bicampeón en 2004 que estuvo a punto de no llegar a Pumas por culpa de Chivas

Francisco "Kikín" Fonseca estuvo a punto de no ser jugador de Pumas pues previo a su paso de la Piedad al Pedregal, una de sus opciones era ira Guadalajara, pero lo iba a hacer como platillo de segunda mesa, o sea, en paquete con Alberto Medina lo cual parecía que no le daría muchos minutos por lo que al final optó por ir con los universitarios:

“Tienes dos opciones, una es Chivas. En realidad, Chivas quiere a Rafa Medina, pero yo te puedo mandar en paquete ahí. ¿Y la otra opción? Es Pumas, Hugo Sánchez te quiere”

Kikín Fonseca: El ídolo que marcó una época en Pumas

Francisco Fonseca, mejor conocido como "Kikín", dejó una huella imborrable en la historia de los Pumas de la UNAM. Su paso por el equipo universitario estuvo marcado por goles espectaculares, títulos importantes y un cariño especial por parte de la afición.

El arribo del "Killer"

Fonseca llegó a Pumas a principios de la década del 2000 y rápidamente se ganó un lugar en el corazón de la afición. Su habilidad goleadora, su entrega en la cancha y su carisma lo convirtieron en uno de los jugadores más queridos del equipo.

Un bicampeonato histórico

Una de las etapas más gloriosas de Kikín en Pumas fue cuando logró conquistar dos títulos de liga consecutivos (Clausura 2004 y Apertura 2004). Sus goles fueron fundamentales para que los universitarios se alzaran con el campeonato en ambas ocasiones. Además, su liderazgo dentro y fuera del campo fue clave para el éxito del equipo.

La conexión con la afición

La conexión entre Kikín Fonseca y la afición de Pumas fue especial. El delantero siempre demostró un gran compromiso con el equipo y con los seguidores universitarios. Su celebración característica, con un salto y un puño al aire, se convirtió en un símbolo de la pasión de los aficionados.

Un final abrupto

Sin embargo, la relación entre Fonseca y Pumas llegó a su fin de manera abrupta. Tras su salida del equipo, hubo un distanciamiento con la afición que generó polémica. A pesar de esto, el legado de Kikín en Pumas sigue siendo imborrable.